A pesar de que Internet pueda parecer un lugar anónimo en el cual los usuarios pueden expresarse con total libertad, lo cierto es que cada vez son más las personas que acaban pagando por exponer opiniones en la red. Un ejemplo de ello nos llega desde San Sebastián (España), donde un hombre ha sido condenado a una multa económica de 700 dólares por insultar a su ex-pareja a través de un blog y en varias redes sociales.
Estos hechos se remontan a principios del mes de abril de 2010 cuando el acusado hizo una entrada en su blog personal acusando a la mujer de haber “secuestrado” a sus hijos y no permitir que los viera, así como también la insultó en repetidas ocasiones. Además, y una de las razones principales por la cual ha sido condenado, el hombre facilitó tanto los nombres y apellidos de la víctima.
Queda claro que hay que llevar cuidado a nuestras actuaciones en la red, especialmente en redes sociales, y es que las consecuencias que pueden traernos, en caso de tener un mal comportamiento, pueden ser realmente desagradables, por lo que desde aquí pedimos a los usuarios que apeléis al sentido común y a la sensatez antes de cualquier intervención en Internet.